Escuelas Católicas Segovia arranca el curso con más de 3.000 estudiantes y reclama mejoras en la financiación

Escuelas Católicas Segovia arranca el curso con más de 3.000 estudiantes y reclama mejoras en la financiación

Escuelas Católicas Segovia arranca el curso con más de 3.000 estudiantes y reclama mejoras en la financiación

Los centros de ideario católico de Segovia comienzan el curso escolar 2024-2025 con un gran respaldo de las familias y representan al 13% de la escolarización de la provincia. Escuelas Católicas Segovia renueva su compromiso con la calidad educativa y la libertad de enseñanza, y reivindica mejoras en la financiación. “La educación concertada es un pilar esencial dentro del sistema educativo, y su correcta financiación y funcionamiento son imprescindibles para garantizar el acceso a una enseñanza equitativa y plural para todas las familias”, explican

El curso escolar 2024-2025 ha arrancado en Segovia con 3.035 estudiantes y 247 profesionales en los tres centros pertenecientes a Escuelas Católicas, lo que supone el 13% de la escolarización en la provincia. En toda Castilla y León, la red de Escuelas Católicas agrupa a 98.263 alumnos distribuidos en 171 centros, atendidos por 9.752 profesionales en 4.467 unidades concertadas. Estos datos confirman el constante respaldo de las familias, que siguen confiando en un modelo educativo basado en la calidad, la innovación y los valores, característicos de la identidad católica y que representa el 28% del alumnado total en la comunidad.

En este nuevo curso, Escuelas Católicas quiere renovar su compromiso con la mejora del sistema educativo y la defensa de la libertad de enseñanza. Entre los retos más importantes a los que se enfrentan están la disminución de la natalidad, el aumento de la burocracia que aleja a los educadores de su función principal o la necesidad de mantener un diálogo constante y fluido con la administración autonómica para garantizar una financiación adecuada de la escuela concertada. “Es el momento de avanzar hacia una verdadera gratuidad de la educación y de que la administración asegure que todas las familias, sin excepción, puedan ejercer su derecho a elegir el centro educativo que mejor responda a sus necesidades y valores», explica Leandro Roldán Maza, secretario autonómico adjunto en la rueda de prensa celebrada en el Colegio Claret de Segovia.

“Pedimos que nuestro ideario se valore y reconozca para que nuestras instituciones educativas puedan desarrollar un proyecto educativo elegido por tantas familias de Castilla y León que optan por un modelo educativo común de identidad católica”, destaca Roldán. “Seguimos trabajando para asegurar la presencia en Castilla y León de la educación católica, y mostrar ante la sociedad el valor de nuestras escuelas: abiertas, de alta calidad, inclusivas, y que contribuyen a la mejora del sistema educativo, ya que mantienen un proyecto común avalado por su experiencia, estabilidad, innovación y compromiso”, subraya Juan José Raya, delegado provincial de Escuelas Católicas Segovia.

Desde Escuelas Católicas reafirman su compromiso con una “educación de calidad y con el cumplimiento estricto de todas las normativas vigentes”, dicen. “La educación concertada es un pilar esencial dentro del sistema educativo, y su correcta financiación y funcionamiento son imprescindibles para garantizar el acceso a una enseñanza equitativa y plural para todas las familias. No se puede exigir equidad educativa, sin garantizar una financiación pública equitativa entre las dos redes que prestan el servicio público de la educación”.

BAJA NATALIDAD Y GRATUIDAD EN INFANTIL 0-3 AÑOS

La preocupante caída de la natalidad en Castilla y León afecta a todos los sectores, incluyendo al sector educativo concertado. A pesar de este contexto, el curso comienza con estabilidad en número de alumnos y unidades concertadas. La implementación del programa de gratuidad para el primer ciclo de Infantil para alumnos de 0 a 3 años, impulsado por la Junta de Castilla y León, ha sido clave para amortiguar el impacto de la baja natalidad. Este curso la previsión es de una reducción del 0,10% en el número total de alumnos, cifra compensada por la incorporación de unos 3.200 alumnos del primer ciclo de Infantil a los centros de Escuelas Católicas. “Nos sentimos satisfechos ya que las familias siguen confiando en nuestros centros y en un modelo de enseñanza que consideran adecuado para sus hijos: de calidad, innovador y con valores”, explican desde la institución.

Además, Escuelas Católicas considera que la baja natalidad puede transformarse en una “oportunidad para Castilla y León”, permitiendo mejorar la calidad educativa global. “La flexibilidad de la administración en la equiparación de la ratio de alumnos mínima en la concertada permite mantener unidades con menos alumnos, y favorece un entorno de mayora calidad educativa y en beneficio de las familias”, dice Leandro Roldán.

“La gratuidad en el primer ciclo de Infantil es un avance muy positivo de Castilla y León para las familias y fomenta la conciliación familiar. Además, amplía la libertad de elección de centros permitiendo que las familias opten por colegios de Escuelas Católicas, beneficiándose de esta gratuidad y evitando agravios comparativos. Nuestro objetivo es que en el futuro, tanto Infantil como Bachillerato, puedan ser etapas concertadas, facilitando el acceso a todas las familias de la comunidad y que cualquiera pueda acudir al centro que desee”, indican desde Escuelas Católicas.

En este curso serán 84 centros de Escuelas Católicas los que ofrecerán el primer ciclo de Infantil gracias al programa de subvenciones de la Junta de Castilla y León. Representan al 15% de los centros que ofrecen estos tres cursos y tendrán unos 3.200 alumnos en sus aulas. En Segovia contamos con un centro que ofrece este ciclo con algo más de un centenar de alumnos.

DESAJUSTE EN LA PARTIDA DE OTROS GASTOS 

El módulo de conciertos continúa siendo insuficiente para cubrir los costes reales de los centros. La actualización recibida en los últimos años sigue sin ser adecuada para hacer frente a los gastos operativos de los centros. “La actualización de los conciertos es cada vez más urgente, puesto que las cuantías actuales no cubren el coste real de la enseñanza. Ahora mismo, el Estado está pagando en torno a un 50% del coste real de la enseñanza. Llevamos mucho tiempo clamando no sólo por una financiación justa, sino porque se cumpla una ley que lleva vigente desde 2006”, manifiesta Leandro Roldán.

Por ello, la actualización de este módulo y en especial la partida de Otros Gastos (destinada al pago del personal no docente, al equipamiento necesario para la labor educativa y al mantenimiento del centro: luz, calefacción, reparaciones ordinarias…) es prioritaria. “Esa partida es insuficiente en Castilla y León ya que los costes reales del funcionamiento de un centro educativo son deficitarios”.

Así, desde Escuelas Católicas se considera urgente la adecuación de los módulos de concierto al coste real del puesto escolar, que habría que actualizar con un estudio nacional que lleva sin realizarse muchos años ya, una reivindicación histórica para que la financiación pública destinada a la educación concertada sea suficiente para cubrir completamente el coste de impartición de las enseñanzas concertadas, tal como establece el artículo 88.2 y el artículo 117 de la LOE, en condiciones análogas a la enseñanza pública.

Escuelas Católicas Castilla y León

Escuelas Católicas Castilla y León es la organización empresarial de centros educativos concertados católicos de Castilla y León. Posee una amplia experiencia educativa y una red de centros y profesores que incluye 171 colegios, 9.000 trabajadores y representa al 28% del alumnado de Castilla y León con 98.000 niños en sus aulas. Es la organización más representativa de titulares de centros concertados de Castilla y León y una de las comunidades educativas con más peso de la región.