Escuelas Católicas Castilla y León celebró hoy en el Colegio Lourdes de Valladolid su Jornada para Equipos Directivos, una cita anual en la que se tratan diversos asuntos de actualidad para los centros educativos como el acoso escolar, el Plan a la diversidad, el Programa Releo, el Programa Erasmus+, responsabilidad en caso de accidentes de trabajo y otros temas pedagógicos. Una jornada de trabajo a la que asistieron 120 directivos de centros concertados pertenecientes a Escuelas Católicas Castilla y León.
María del Pilar González García en su intervención en la Jornada de Directivos Escuelas Católicas Castilla y León
Abrió la jornada María Teresa Vicente Calvo, Fiscal de Menores de la Fiscalía provincial de Valladolid, que habló sobre el acoso escolar en centros educativos, su prevención y actuación.
Sandra Merchán Tamayo, Jefa del Servicio de Coordinación Jurídica en MC Mutual, explicó las responsabilidades derivadas del Accidente de Trabajo. Después fue el turno de exponer temas pedagógicos como el Plan Releo y el Plan de Atención a la Diversidad, a cargo de María del Pilar González García, Directora General de Innovación y Equidad Educativa de la Consejería de Educación de Castilla y León, María Victoria Mielgo, Jefa de servicio de innovación educativa de la Dirección General de Innovación y Equidad Educativa de la Consejería de Educación de Castilla y León y Marienma González Martín, Jefa de servicio de atención a la diversidad de la Dirección General de Innovación y Equidad Educativa de la Consejería de Educación.
Por último, Fernando Martín Pérez, Inspector de Educación de la Dirección Provincial de Valladolid, analizó a los asistentes el Programa Erasmus+.
Fiscal de Menores: “El acoso escolar es un problema de toda la sociedad”
Antonio Guerra presenta la Jornada de Directivos junto a la Fiscal de Menores María Teresa Vicente.
María Teresa Vicente Calvo, Fiscal de Menores de la Fiscalía provincial de Valladolid fue, sin duda, la que generó más expectación ante su charla sobre el acoso escolar. La Fiscal acercó a los presentes la forma de trabajar de la Fiscalía de Menores, ofreciéndoles consejos y respondiendo a sus preguntas.
María Teresa Vicente se refirió al acoso escolar como “un problema de toda la sociedad, no conseguiremos nada trabajando cada uno por su lado: colegios, padres, Fiscalía… Es importante unir fuerzas para conseguir eliminar el acoso y que los agresores tomen conciencia de lo que está mal”.
Según la Fiscal, el problema de fondo es “un problema de toda la sociedad, el acoso escolar es algo sobre lo que tendríamos que concienciar mucho más sobre nuestra labor”. También defendió el trabajo de los centros: “Reconozco que los padres se preocupen pero también hay que tener más confianza en las instituciones, en los centros”.
La Fiscal habló también del ciberacoso a través de internet, redes sociales, móviles… como la situación de acoso más habitual en los últimos tiempos. “Hay que implicar a todos, también a los padres, que tienen la obligación de controlar y vigilar a sus hijos, no pueden dejar a los menores sin vigilancia con un instrumento tan peligroso, y a la vez tan útil, como es el acceso a internet”, dijo.
“El acoso a través de redes sociales es durísimo y suele ser reiterado en el tiempo, y además es público. En la actualidad el peligro está en los móviles, el Whatsapp, las redes sociales… Muchos menores utilizan los teléfonos de sus padres, algo muy peligroso, ya que en cuestión de minutos cualquier imagen o información puede difundirse por la red a cientos de personas”, comentó.
Según María Teresa Vicente el ciberacoso es algo “preocupante”, y opinó: “Tendrían que estar prohibidos los teléfonos móviles en los centros. Lo hemos tomado como algo natural, pero no veo esta necesidad porque si ocurre algo siempre se va a avisar a la familia de un modo u otro. Habría que replantearse todo porque no es lógico que niños pequeños vayan con móvil al colegio”, dijo.
El trabajo de la Fiscalía de Menores
La Fiscalía de Menores se encarga de investigar e instruir los casos de delitos de menores. Los menores de 14 años no son imputables, aunque el acoso se produce incluso mucho antes, pero “nosotros actuamos igualmente con los menores de esa edad para intentar conseguir una solución o mediación, al menos que los agresores tomen conciencia de la debilidad de las víctimas”, dijo la Fiscal.
La Fiscalía de Menores tiene competencia en materia de protección, “oímos cualquier tipo de denuncia, creamos un expediente, escuchamos a la víctima en un ambiente tranquilo y sosegado, ya que contamos con un equipo con psicólogos y trabajadores sociales con mucha experiencia. Son situaciones duras para el menor, experiencias muy difíciles, y es complicado que cuenten todo lo ocurrido, ni siquiera a sus padres”, comentó la Fiscal María Teresa Vicente.
“También citamos a los padres, que muchas veces no saben lo que está pasando con sus hijos. A veces comenzamos un expediente no por denuncias de los padres. También hay policías tutores (Policía local y Nacional) que pueden empezar una denuncia o los propios centros pueden iniciarlo”, dijo. Los centros educativos tienen un protocolo de acoso escolar “muy bueno”, añadió la Fiscal, “pero a veces de forma paralela tenemos que intervenir aunque desde el centro se intente reconducir la situación en el ámbito escolar”.
Delitos investigados
En la Fiscalía de Menores se criminaliza las conductas aisladas leves (lesiones, amenazas…) y también si son graves (Delito contra la integridad moral). Este delito es el más utilizado últimamente. “Tenemos muchos delitos así, incluso con condenas, en los últimos meses. El Delito contra la integridad moral es cualquier situación que implique humillación para el menor, acciones en las que se le esté haciendo de menos al menor, etc”, argumentó la Fiscal.
También hay varias infracciones que se han despenalizado como las vejaciones leves y los insultos. “Antes era posible perseguir a los menores y hacerles tomar conciencia de lo que está haciendo, pero ahora, a pesar de no existir pena, intentamos que no se quede en nada. Muchas veces se archivan los casos y creamos un informe que sirve para tomar medidas en el centro. Otras veces podemos también acudir a los servicios de mediación”.
Otro delito que persigue la Fiscalía es el descubrimiento y revelación de secretos, (subir fotografías humillantes a internet, difusión de datos personales que forman parte de la intimidad del menor). “Es algo muy habitual también, tenemos muchos casos. Ese afán de exhibicionismo que tenemos en la sociedad es peligroso. Los menores imitan a los mayores pero no tienen conciencia del enorme peligro que supone difundir ese tipo de imágenes, no saben en qué manos va a caer esa foto. Hay que concienciar a los menores de estos peligros”, señaló.
La actuación de los centros educativos en caso de acoso escolar
“No tengáis miedo a la hora de contactar con la Fiscalía de Menores”, insistió la Fiscal. “En cada provincia hay una Fiscalía. Estamos abiertos a todos, necesitamos colaborar unos con otros. No pasa nada, pero es necesario complementar vuestros protocolos con el expediente de Fiscalía. Ambos perseguimos la erradicación de este tipo de conductas y protegemos a las víctimas (agredido y agresor)”.
Lo que dejó claro la Fiscal es que el centro tiene la obligación de denunciar cualquier caso de acoso. “Debéis ponerlo inmediatamente en conocimiento de la Fiscalía”, dijo. “Cualquier ciudadano o centro tiene la obligación de informar a la Fiscalía de un posible caso de acoso escolar, aunque la familia también lo haga. La manera de defender al centro es denunciar esos hechos no ocultándolos. Tenemos claro que todos queremos acabar con este problema, y para ello es imprescindible informar y denunciar”, manifestó la Fiscal.
“Callar no es bueno, hay que despertar la conciencia de que el acoso escolar no se puede tolerar, y se hace denunciando”, dijo. “No significa que todos los casos acaben en sentencia y no es incompatible poner en marcha el protocolo del centro con nuestra investigación desde Fiscalía. Nos interesa que el menor salga adelante y poder reconducirle sin castigo penal por otras vías como los servicios de mediación”.