Los 171 centros educativos de la red educativa concertada católica inician el nuevo curso 2024-2025 con el respaldo de las familias mientras reivindican soluciones para superar la baja natalidad de Castilla y León, una financiación más amplia que mejore el modelo educativo autonómico y una ampliación de la oferta concertada en Formación Profesional
Hoy comienza el curso 2024-2025 para 98.263 alumnos de los centros de Escuelas Católicas Castilla y León. Una vez más, las familias han depositado su confianza en este proyecto educativo común, caracterizado por su calidad, valores y enfoque innovador, ofrecido por los 171 centros que se agrupan en la red de educación concertada católica. Estos alumnos se distribuyen en 4.467 unidades concertadas, atendidos por 9.752 trabajadores, representando así al 28% del alumnado total de Castilla y León.
En este nuevo curso la red de Escuelas Católicas mantiene su compromiso con la mejora del sistema educativo y la defensa de la libertad de enseñanza. Para ello afronta desafíos como el descenso de natalidad, el aumento de la burocracia que aleja a los educadores de su función o el mantenimiento de un diálogo fluido con la administración autonómica para mejorar la financiación de la escuela concertada. “Pedimos que nuestro ideario se valore y reconozca con un enfoque colaborativo y respetuoso que permita a nuestras instituciones educativas cumplir con un proyecto educativo elegido por muchas familias de Castilla y León que optan por un modelo educativo de identidad católica”, explicó Leandro Roldán, secretario autonómico adjunto en la rueda de prensa celebrada en el Colegio San José de Valladolid.
BAJA NATALIDAD Y GRATUIDAD EN INFANTIL 0-3 AÑOS
La bajada de la natalidad en Castilla y León es muy preocupante para todos y también para Escuelas Católicas. Pese a todo, este curso comienza con cierta estabilidad en número de alumnos y unidades concertadas. La puesta en marcha por parte de la Junta de Castilla y León del sistema de gratuidad para el primer ciclo de Infantil para alumnos de 0 a 3 años ha servido para paliar las cifras generales. Así, la previsión de la organización empresarial es de un descenso del 0,10% en el alumnado total, que se equilibra con los nuevos alumnos del primer ciclo de Infantil, unos 3.200 en sus centros. “A pesar de ello, estamos satisfechos porque las familias siguen eligiendo nuestros centros y nuestro modelo de enseñanza porque consideran que es el modelo que quieren para la educación de sus hijos, con un proyecto educativo común, de calidad, innovador y con valores”, argumentan.
Además, desde Escuelas Católicas creen que la baja natalidad debe ser una “oportunidad para Castilla y León”, para aumentar la calidad educativa, ya de por sí brillante según los excelentes resultados del último informe PISA. “La flexibilidad de la administración en la equiparación de la ratio de alumnos mínima en la concertada permite mantener unidades con menos alumnos, lo que conlleva más calidad educativa y un gran beneficio para las familias”, dice Leandro Roldán.
“La gratuidad en el primer ciclo de Infantil es una apuesta de Castilla y León que beneficia a las familias y que sirve para avanzar en la conciliación familiar y en la ampliación de la libertad de elección de centros ya que las familias que eligen colegios de Escuelas Católicas podrán también beneficiarse de esta gratuidad, evitando agravios comparativos. Nuestro deseo es que esta etapa, al igual que la de Bachillerato, puedan convertirse en un futuro en una concertación plena que ayude a todas las familias de la comunidad, para que cualquiera pueda acudir al centro que desee”.
En este curso serán 84 centros de Escuelas Católicas los que ofrecerán el primer ciclo de Infantil gracias al programa de subvenciones de la Junta de Castilla y León. Representan al 15% de los centros que ofrecen estos tres cursos y tendrán 250 unidades con unos 3.200 alumnos en sus aulas.
DESAJUSTE EN LA PARTIDA DE OTROS GASTOS
El módulo de conciertos sigue siendo insuficiente y la actualización recibida en los últimos años no se corresponde con los gastos reales que tienen los centros. “A nivel nacional esto provoca que estemos ya por debajo del 60% de lo que debe cubrir el módulo, en cuanto a los gastos y necesidades reales de mantenimiento que tienen los colegios y que, según la ley, tienen que cubrirse con esa financiación”, comentan desde Escuelas Católicas Castilla y León.
Por eso se considera prioritario el aumento de la partida de Otros Gastos (destinada al pago del personal no docente, al equipamiento necesario para la labor educativa y al mantenimiento del centro: luz, calefacción, reparaciones ordinarias…), una partida insuficiente en Castilla y León ya que los costes reales del funcionamiento de un centro educativo son deficitarios.
Además, indican que es necesaria la adecuación de los módulos de concierto al coste real del puesto escolar, que habría que actualizar con un estudio nacional que lleva sin realizarse muchos años ya.
MÁS OFERTA CONCERTADA EN FORMACIÓN PROFESIONAL
Recordamos que este curso entra en vigor el nuevo sistema de Formación Profesional y debido al retraso del Ministerio de Educación en la aprobación de la normativa de desarrollo la actualización de los currículos de todos los ciclos formativos está suponiendo un serio problema. “Empezamos el curso escolar con cierta incertidumbre en este nivel”, explican.
Además, otra reivindicación propuesta por Escuelas Católicas Castilla y León es el necesario aumento de oferta de Formación Profesional concertada. “Contamos con un gran número de centros de FP que poseen gran experiencia, recursos y profesionalidad, y que mantienen una fluida colaboración con la empresa privada. Es importante aprovechar estos recursos para mejorar la calidad educativa en FP”, comentan. Es necesario hacer un esfuerzo con un progresivo aumento de la oferta de FP concertada en Castilla y León “ya que hay muchos títulos autorizados que tienen demanda y que no están suficientemente implantados en nuestra comunidad.
También este curso habrá novedades positivas para la concertada con un aumento de horas de diversificación, del Programa de Diversificación Curricular, que se establece para alumnos con dificultades en 3º y 4º de Secundaria para ayudarles a lograr la titulación. “Estamos satisfechos, ya que esto se suma a la mejora del curso pasado de la dotación horaria para el desarrollo de la orientación en centros concertados. Dos programas que demuestran el esfuerzo de la administración por mejorar las condiciones de los alumnos y familias de Castilla y León”, dice Leandro Roldán.
NUEVO SECRETARIO AUTONÓMICO
En cuanto a la organización interna de Escuelas Católicas Castilla y León, desde septiembre la institución cuenta con un nuevo secretario autonómico, Ricardo Bernardo Redondo, que sustituye a Leandro Roldán Maza después de ocho años al frente de la gestión de la organización empresarial. Ricardo Bernardo compatibilizará su nueva función con la asesoría jurídica a la institución. Por su parte, Leandro Roldán Maza continuará como secretario autonómico adjunto, como apoyo en relaciones externas con instituciones, difusión corporativa y comunicación.
“Debemos seguir trabajando para garantizar nuestra presencia en Castilla y León con la educación católica”, comentaron sobre los retos futuros de la institución, “para mostrar ante la sociedad y las administraciones el valor propio de la escuela de ideario católico como una escuela abierta, acogedora, que mejora el sistema educativo, y que mantiene un proyecto común avalado por su experiencia, calidad, estabilidad, innovación y compromiso. Un modelo educativo que mantiene su apuesta por la educación integral de los alumnos, por una educación en valores sustentada por una atención individualizada y un seguimiento constante de cada alumno”.
Escuelas Católicas Castilla y León
Escuelas Católicas Castilla y León es la organización empresarial de centros educativos concertados católicos de Castilla y León. Posee una amplia experiencia educativa y una red de centros y profesores que incluye 171 colegios, 9.000 trabajadores y representa al 28% del alumnado de Castilla y León con 98.000 niños en sus aulas. Es la organización más representativa de titulares de centros concertados de Castilla y León y una de las comunidades educativas con más peso de la región.