
Toda la comunidad educativa de Escuelas Católicas Castilla y León y, en concreto, los centros educativos pertenecientes a la provincia de Burgos también han mostrado su solidaridad con el colegio público Padre Manjón, así como con su equipo directivo, profesorado y alumnado, tras la agresión de una madre a una profesora del centro el pasado miércoles de 26 de marzo.
Tras este triste suceso, ayer 31 de marzo, los colegios se unieron al acto conjunto convocado en cada centro al inicio de la actividad lectiva de la jornada escolar. Bajo el lema “STOP agresiones. La educación es un derecho. El respeto es un deber.” y “La violencia escolar no tiene ni silla ni pupitre.” profesores, alumnos y familiares se concentraron para gratiar “Basta ya” ante la violencia en el ámbito educativo. Además, se leyó de forma conjunta el manifiesto en contra de la violencia, tanto física como verbal, hacia el profesorado.
Faustino Díez Iglesia, Coordinador de Escuelas Católicas Burgos y Director del Colegio Niño Jesús – Fundación Educere de la ciudad ha mostrado, de parte de toda la red católica y burgalesa, su profundo apoyo al CEIP Padre Manjón: “Queremos expresar nuestra posición en contra de toda agresión física o verbal al cuerpo docente. Nuestro ánimo es mostrar un firme apoyo y repulsa de toda violencia en nuestras comunidades educativas.”

MANIFIESTO EN CONTRA DE LA VIOLENCIA HACIA EL PROFESORADO
“Buenos días a todos.
La semana pasada nos enteramos de una triste noticia: la agresión a una maestra en un centro educativo de Burgos. Queremos comenzar este manifiesto mostrando todo nuestro apoyo a las personas que han sufrido cualquier tipo de violencia física, verbal, o psicológica en cualquier ámbito y especialmente en los centros educativos. La comunidad educativa está formada por muchas personas (alumnos, profesores, familias, personal laboral, monitores…) y todos merecen la misma consideración y respeto.
La violencia es y será algo totalmente inaceptable, venga de donde venga, y ha llegado el momento de decir ¡BASTA!
Tenemos que recordar que la Constitución Española, en su artículo 15, recoge el derecho a la integridad física y moral, como también aparece en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En Castilla y León contamos además, con la LEY 3/2014, de 16 de abril, de autoridad del profesorado reconociendo esta autoridad así como la consideración y respeto que deben estar siempre presentes en el ejercicio de las funciones y responsabilidades de todos los docentes. Todo ello con una misma finalidad, la de garantizar el pleno ejercicio del derecho a la educación de todo el alumnado.
La educación es la base de cualquier sociedad que debe reposar sobre pilares tan importantes como son el RESPETO, la COLABORACIÓN, la EMPATÍA y el DIÁLOGO.
Esperamos de corazón que esta triste noticia se convierta en un punto de inflexión que nos ayude a reflexionar y a erradicar en los centros educativos cualquier tipo de violencia verbal, física o psicológica porque, desafortunadamente, no es algo puntual o anecdótico. No es difícil encontrar situaciones a lo largo del curso en los que se vulneran en mayor o menor medida estos principios fundamentales.
Sabemos que somos muchos más los que entendemos que la mejor de las enseñanzas es un buen ejemplo, que nuestros alumnos son presente y futuro de nuestra sociedad, que nuestra labor es un trabajo en equipo y que todos formamos parte de una comunidad educativa con un mismo objetivo: preparar a nuestros alumnos de hoy para que se conviertan en ciudadanos del mañana.
La violencia no tiene silla, ni pupitre ni espacio en los centros educativos y mantenerla fuera es labor de todos, es una responsabilidad y un compromiso. GRACIAS.
LA EDUCACIÓN ES UN DERECHO, EL RESPETO UN DEBER.”