Escuelas Católicas quiere expresar su preocupación ante la aprobación hoy por el Consejo de Ministros del proyecto de una nueva Ley de Educación que nace sin consenso; considera a la enseñanza concertada como subsidiaria de la escuela pública; y limita los derechos de los titulares de los centros y de las familias, sometiendo la libertad de elección a la «planificación» administrativa y poniendo en riesgo la continuidad de numerosas unidades concertadas.